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¿Cómo se inició la amistad entre humanos y perros? Los últimos hallazgos en Alaska responden la pregunta

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La amistad entre humanos y perros es una de las relaciones más antiguas y simbólicas de la historia. Sin embargo, ¿cuándo comenzó realmente?.

Un hallazgo reciente en Alaska podría acercarnos a responder esta pregunta, revelando evidencias de vínculos estrechos entre los primeros habitantes de América y los ancestros de los perros modernos hace 12.000 años.

El estudio, publicado en la revista Science Advances por un equipo liderado por François Lanoë, investigador de la Universidad de Arizona, analiza restos arqueológicos de caninos encontrados en dos sitios clave del interior de Alaska: Swan Point y Hollembaek Hill. Estos huesos, que datan de hace 12.000 y 8.100 años respectivamente, proporcionan un fascinante vistazo a las primeras interacciones entre humanos y grandes caninos en el continente americano.

Evidencias En El Registro Arqueológico

En 2018, en el sitio de Swan Point, se descubrió un tibia de un canino adulto que vivió hacia el final de la Edad de Hielo. Más tarde, en 2023, una mandíbula de 8.100 años encontrada en Hollembaek Hill ofreció nuevas pistas. Ambos restos muestran algo asombroso: los animales consumieron salmón de manera regular, algo inusual para los grandes caninos salvajes de esa época, que normalmente se alimentaban de presas terrestres.

“El consumo de salmón es la prueba concluyente porque estos animales no habrían cazado salmón en estado salvaje”, explicó Ben Potter, coautor del estudio y arqueólogo de la Universidad de Alaska Fairbanks. Según los investigadores, la única explicación lógica es que estos caninos dependieran de los humanos para acceder a este alimento.

¿Perros O Lobos Domesticados?

Una de las preguntas clave que aborda el estudio es si estos animales eran perros domesticados o lobos en proceso de domesticación. “En términos de comportamiento, parecen ser como perros, ya que comían salmón proporcionado por la gente”, comentó Lanoë, “pero genéticamente, no están relacionados con nada que conozcamos”.

Esto plantea lo que Potter denomina una cuestión existencial: ¿qué es un perro? Según el estudio, estos caninos podrían representar un punto intermedio en el largo proceso de domesticación. Aunque algunos podrían haber sido lobos que convivían con humanos, también es posible que fueran perros tempranos que no dejaron descendientes genéticos en las poblaciones actuales.

Una Relación Simbiótica Temprana

El estudio no solo revela pistas sobre el inicio de la domesticación, sino que también destaca la relación simbiótica entre humanos y caninos en una época de grandes desafíos climáticos y ecológicos. En el contexto de la Última Glaciación, compartir recursos como el salmón probablemente beneficiaba tanto a los humanos como a sus compañeros caninos.

Según Lanoë, la dependencia mutua pudo haber sido clave para la supervivencia. Los autores del estudio señalan que es fascinante pensar que esta relación tan importante para los humanos modernos, como tener un perro, ya existía en un periodo tan temprano.

Contexto Cultural E Importancia Comunitaria

El trabajo arqueológico en el valle de Tanana, donde se ubican Swan Point y Hollembaek Hill, ha sido realizado en estrecha colaboración con las comunidades indígenas locales. Los investigadores presentaron sus planes al Consejo de la aldea de Healy Lake, que autorizó el análisis genético de los restos.

Para Evelynn Combs, miembro de la comunidad indígena Healy Lake y coautora del estudio, que creció explorando sitios arqueológicos en esta región, la relación con los caninos tiene un significado profundo. “Me gusta mucho la idea de que, en el registro, por mucho tiempo que haya pasado, es una experiencia cultural repetible que tengo esta relación y este nivel de amor con mi perro”, comentó.

El estudio sugiere que los humanos no solo interactuaban con los caninos, sino que también los consideraban compañeros esenciales para la caza y el transporte. Esta relación, que comenzó hace miles de años, evolucionó hasta convertirse en el vínculo estrecho que conocemos hoy.

Además, los hallazgos abren nuevas preguntas sobre cómo los humanos llegaron a Américacon sus compañeros caninos y cómo estos desempeñaron un papel en la adaptación al duro entorno subártico.

¿El Inicio De Una Historia Compartida?

El descubrimiento de los restos en Alaska no solo amplía nuestra comprensión de la historia de la domesticación, sino que también invita a reflexionar sobre el impacto cultural y emocional de los perros a lo largo del tiempo. Desde los ancestros que compartieron salmón con estos caninos hasta los millones de hogares que hoy los consideran parte de la familia, los perros han sido más que compañeros: han sido aliados en la supervivencia y la adaptación humana.

Este vínculo, sellado hace al menos 12.000 años, sigue siendo un recordatorio de cómo las relaciones entre especies pueden cambiar el curso de la historia.